CalmiGo es el nombre del dispositivo portátil que el ingeniero biomédico Adi Wallach y su madre, la doctora Orna Levin, desarrollaron para controlar los ataques de pánico y ansiedad de Wallach.
¿Por qué se creó este plan?
El dispositivo ayuda a las personas que sufren estrés o ansiedad a controlar su respiración, sin necesidad de esfuerzo cognitivo. Como resultado, en tres minutos, la persona se sentirá mucho mejor.
Wallach explica que los métodos convencionales de control de la respiración requieren que la persona sea consciente y se concentre en contar las respiraciones, lo que a su vez activa el sistema nervioso simpático, responsable de enviar señales al cuerpo para huir o luchar. En estos momentos, estos estímulos son los que hay que evitar.
¿Cómo funciona el sistema?
Por ello, CalmiGo enciende tres luces intermitentes que guían la respiración de la persona, activando el sistema nervioso parasimpático, encargado de enviar estímulos que relajan el cuerpo.
Además, el dispositivo, que es lo suficientemente pequeño como para llevarlo en un bolsillo, tiene un mecanismo que lee el patrón de respiración del usuario y se adapta para ralentizar las respiraciones durante el periodo recomendado de tres minutos.
Los usuarios también pueden optar por hacer vibrar el dispositivo, después del periodo de respiración, para activar el sentido del tacto y ayudar aún más a disipar el ataque de pánico. Además, el sentido del olfato también se activa, ya que el CalmiGo lleva incorporado un panel de aromas que contiene aceites especiales utilizados en aromaterapia para aumentar los niveles de relajación.
Los expertos afirman que se han vendido unas 20.000 unidades de su producto, fabricado por su empresa Dendro Technologies, y que la Administración de Veteranos de EE.UU. incluso ha comprado los dispositivos para que los utilicen sus miembros.